El 8 de diciembre de 1870, hace 150 años, el Papa Pío IX publicó el decreto Quemadmodum Deus, estableciendo a San José como “Patrono de la Iglesia Católica”.
Profecías de Esperanza para los Últimos Tiempos

2 Crónicas

7 Aquella misma noche, Dios se apareció a Salomón y le dijo: «Pídeme lo que quieras».
8 Salomón respondió a Dios: «Tú has tratado a mi padre David con gran fidelidad y me has hecho reinar en lugar de él.
9 Ahora, Señor Dios, que se cumpla la promesa que le hiciste a mi padre David, ya que tú me has constituido rey sobre un pueblo numeroso como el polvo de la tierra.
10 Por eso, dame sabiduría e inteligencia, para que yo pueda guiar a este pueblo, porque ¿quién podría juzgar a un pueblo tan grande como el tuyo?».
11 Dios respondió a Salomón: «Ya que me haces esta petición y no reclamas riquezas, ni posesiones, ni gloria, ni la muerte de tus enemigos, ni tampoco una larga vida, sino que pides sabiduría e inteligencia para juzgar a mi pueblo, del cual te he constituido rey,
12, por eso te son concedidas la sabiduría y el entendimiento, y además te daré riquezas, posesiones y gloria, como no las tuvo ninguno de los reyes antes de ti, ni las tendrá ninguno después de ti».
13 Salomón regresó a Jerusalén desde el lugar alto de Gabaón, donde estaba la Carpa del Encuentro, y reinó sobre Israel.
14 Salomón reunió carros de guerra y caballería: llegó a tener mil cuatrocientos carros y doce mil caballos, y los acantonó en las ciudades destinadas a las carros, y en Jerusalén, junto al rey.