Un hombre canadiense solicitó ser sacrificado legalmente porque consideró que morir era una mejor opción que quedarse sin hogar.
Amir Farsoud, de 54 años, solicitó la drástica medida después de que la casa de huéspedes donde vive fuera puesta en el mercado. Farsoud vive con un dolor de espalda agotador e incurable, lo que le permitió calificar para el controvertido programa de asistencia médica para morir (MAiD) de Canadá.
Pero no fue su dolor de espalda lo que hizo que Farsoud presentara la solicitud, sino la posibilidad de quedarse sin hogar después de que los servicios sociales de Canadá no le brindaran apoyo.
Extraño salva la vida de Farsoud
Farsoud ya consiguió una de las dos firmas médicas necesarias para ser aceptado en el programa MAiD, pero finalmente cambió de opinión cuando una página de GoFundMe establecida a su nombre por un extraño recaudó más de $ 60,000, que es suficiente para conseguirle una nueva casa.
“No quiero morir, pero no quiero estar sin hogar más de lo que no quiero morir. No es mi primera opción”, dijo Farsoud en una entrevista con City News .
Farsoud vive de los servicios sociales, pero la asignación es tan escasa que se queda con solo $7 diarios para comida y casi nada para pagar el alquiler.
Cuando la casa de huéspedes que comparte con otras dos personas salió a la venta, decidió solicitar la eutanasia.
Con su dolor de espalda crónico, Farsoud dijo que posiblemente moriría en las calles de todos modos. Entonces pensó que también podría terminar con su vida de una manera simple. “Lo sé, en mi estado de salud actual, no sobreviviría de todos modos. No sería nada digno esperar, así que si esas se convierten en mis dos opciones, es prácticamente una obviedad”, dijo Farsoud.
El dolor de espalda de Farsoud comenzó después de que un accidente hace muchos años lo dejara incapaz de llevar una vida normal. “No hago nada más que manejar el dolor”, dijo.
Pero se apresuró a señalar que, a pesar de su dolor, no consideraría la eutanasia si tuviera un lugar asequible y confiable para vivir.
“Estaría entre mis opciones porque mi condición física solo empeorará. En ese momento, probablemente estaría aprovechando la opción, pero presumiblemente eso sería dentro de unos años”, dijo Farsoud.
MAiD se legalizó en Canadá en 2016 con el objetivo de ofrecer una opción para las personas cuya muerte es inevitable y esperada. A principios de este año, se amplió para incluir a las personas que viven con discapacidades debilitantes o dolor, incluso si sus vidas no corren un riesgo instantáneo.
La falta de apoyo del gobierno hace que personas como Farsoud consideren el suicidio
Antes de ser salvado, Farsoud dijo que tenía miedo de morir. “¿Quién no lo tiene? Sí, yo lo tengo. ¿Quién no lo tendría?” Farsoud le dijo a City News .
Remarcó que era “horrible” y “al revés” que personas como él necesiten mirar el suicidio porque sus servicios sociales no pueden apoyarlos.
“Creo que en un país como el nuestro, la gente no debería pasar hambre y no debería preocuparse por si hay un techo sobre sus cabezas. Creo que en realidad tenemos los medios para que eso no sea un problema y el hecho de que estemos eligiendo no ayudar a los miembros más vulnerables de la sociedad es trágico”, dijo Farsoud.
Después de que la historia de Farsoud llegó a los titulares, una mujer anónima llamada Effy creó un GoFundMe para él. Los $ 60,000 que recaudó fueron suficientes para que Farsoud tuviera un lugar donde vivir y cambiara de opinión acerca de terminar con su vida.
“Soy una persona diferente. La primera vez que hablamos, no tenía nada más que oscuridad, miseria, estrés y desesperanza. Ahora tengo todo lo contrario de esas cosas”, dijo Farsoud.
Mientras tanto , Canadá ha presentado un proyecto de ley que permitirá que las personas con enfermedades mentales tengan muerte médicamente asistida o eutanasia. A partir del 17 de marzo de 2023, la ley MAiD de Canadá permitirá que las personas cuya única afección médica básica sea una enfermedad mental sean elegibles para la muerte asistida .
La eutanasia es un acto aberrante a Mis Ojos
Mensaje del Libro de la Verdad 🏹
3 de noviembre de 2014
La eutanasia es un pecado mortal y no puede ser perdonado. Aquél que ayuda, asiste o decide quitarse la vida, por la razón que sea, comete un pecado terrible a los Ojos de Dios.
Éste es de todos los pecados, uno de los mayores el tomar una vida, y además declarar que la muerte deliberada prevista de cualquier persona, es una cosa buena. Entre los muchos actos cuidadosamente planeados en contra de Dios, que están siendo presentandos deliberadamente al mundo en este momento, con el propósito de animar a la gente a que peque contra Dios, está el pecado de la eutanasia. No os equivoquéis, la eutanasia es un acto aberrante a Mis Ojos, y lleva consigo graves consecuencias para aquellos que participan en el acto.
Es un pecado mortal matar a cualquier alma y esto incluye a las almas desde el momento de su concepción, hasta los que viven sus últimos meses en la tierra. Nada puede justificar el quitar la vida humana, cuando se lleva a cabo en el pleno conocimiento de que la muerte se producirá en un momento determinado. La muerte causada a otra alma viviente niega la existencia de Dios. Si aquellos que son culpables de este acto aceptan la existencia de Dios, entonces, mediante la realización de tal acto, rompen el 5 º Mandamiento.
Hay un plan, en este momento, para animar a millones de personas a reducir la vida del hombre – tanto la vida del cuerpo como la vida del alma. Cuando vosotros lleguéis a ser participante voluntario en un acto, el que profane la santidad de la vida humana, no tendréis vida – la Vida Eterna – y la salvación no puede ser, ni será, vuestra.
Vuestro Jesús
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