¿Por qué Dios parece callar en los momentos más oscuros?

¿Por qué Dios parece callar en los momentos más oscuros? ¿Por qué, cuando más lo necesitamos, el Cielo parece estar en absoluto silencio? Entender esto cambiará tu forma de ver la fe.

“Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?” (Mateo 27,46)

¿Por qué Dios parece callar en los momentos más oscuros?

¿Por qué, cuando más lo necesitamos, el Cielo parece estar en absoluto silencio?

Entender esto cambiará tu forma de ver la fe.

Todo creyente, en algún punto de su vida, experimenta el silencio de Dios.

Oras… y no hay respuesta.
Clamas… y el dolor sigue ahí.
Buscas una señal… y el cielo parece vacío.

El alma grita, pero solo escucha su propio eco.

El silencio de Dios es la prueba más difícil de la fe.

Cuando la oración parece chocar con un muro…
Cuando el alma clama y no obtiene respuesta…

Es entonces cuando surgen las dudas.

“Dios me ha abandonado?”

“Acaso no le importa?”

Y esa pregunta nos lleva a la cruz.

“Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?”
(Mateo 27,46)

Estas palabras de Cristo en la cruz no fueron un grito de desesperación…

Fueron el cumplimiento de la Escritura y la clave para entender el sufrimiento.

Cristo, en la cruz, no fue abandonado por el Padre.

Dios nunca abandona a su Hijo. La Trinidad es eterna e indivisible.

Pero en su humanidad, Cristo cargó con el peso del pecado del mundo y experimentó, en su carne, la angustia extrema que siente el alma cuando se aparta de Dios.

El Catecismo de la Iglesia Católica lo explica así:

“Jesús ha conocido la angustia del abandono por parte del Padre al llevar nuestros pecados, pero al mismo tiempo se abandona confiadamente a Él.” (CIC 603).

No fue un abandono real.

Fue el cumplimiento de la profecía y el clamor de toda alma que sufre.

Cuando Jesús exclamó esas palabras, estaba citando el Salmo 22.

Este salmo empieza con angustia, pero termina en victoria:

“Clamé y tú no me respondiste… pero tú habitas en medio de las alabanzas”

“Los pobres comerán y serán saciados; los que buscan al Señor, lo alabarán.”

Jesús estaba anunciando lo que vendría: la Resurrección.

No fue una señal de desesperación, sino una profecía que se cumplía ante los ojos del mundo.

Dios no lo abandonó… y tampoco te abandona a ti.

¿Por qué Dios permite el silencio?

Porque el amor se prueba en la oscuridad.

Si siempre sintieras su presencia… ¿sería realmente fe?

Si Dios respondiera cada oración al instante, ¿sería realmente confianza?

La fe no es creer cuando todo es claro.
Es sostenerse cuando todo parece perdido.

San Juan de la Cruz llamó a esto “la noche oscura del alma”:

El momento donde Dios parece distante… pero en realidad está más cerca que nunca.

Mira la historia de Job.

Lo perdió TODO:

Familia, riquezas, salud… y el silencio de Dios lo consumía.

Pero al final, cuando Dios habló, le mostró que nunca lo había abandonado.

“Antes te conocía de oídas, pero ahora mis ojos te han visto.” (Job 42,5)

El silencio de Dios no es ausencia.
Es un proceso.
Es la purificación de la fe.

Imagínate una semilla bajo tierra.

Desde fuera, parece que nada ocurre…

Pero por dentro, está rompiéndose, echando raíces, transformándose.

Dios obra igual.

Cuando no lo ves, cuando no lo sientes, cuando todo parece seco…

Es cuando más está actuando en lo profundo.

La Resurrección no vino antes del silencio.

La gloria no llega sin pasar por la cruz.

¿Qué Hacer en el Silencio?

Si estás en una de esas etapas donde Dios parece distante…

No desesperes. Sigue firme.

Cuando Dios calla:

No significa que te ha abandonado.
No significa que no le importas.
No significa que tu oración es inútil.

Significa que te está formando.

Job no vio la respuesta en su peor momento.
Jesús, en su humanidad, experimentó la angustia en la cruz.

Pero al final, la gloria llegó.
Lo mismo pasa contigo.

Si estás en el silencio de Dios… no dejes de orar.

Pero cambia tu pregunta.

No digas “¿Dios, dónde estás?”
Di “Dios, qué quieres enseñarme en este silencio?”

Porque a veces, cuando Dios guarda silencio…

Es porque está obrando en lo más profundo de tu alma.

Enrique Valtierra

@elcaminodelogos

No teman, hijos, el abandono es algo que sentirán cuando estén cerca de Mí

Mensaje del Libro de la Verdad 🏹

30 de noviembre del 2011

Aquellos muy ansiosos de probar su amor por Mí, muy a menudo se encuentran desesperación en sus almas, la cual les deja sintiéndose vacíos de Mi amor. Esto puede ser tan inesperado, que puede dejar el alma en tal estado de abandono, que se siente como si nunca se fueran a reponer de los sentimientos de impotencia y falta de Fe.

No teman, hijos, el abandono es algo que sentirán cuando estén cerca de Mí, Yo sentí el mismo abandono por Mi amado Padre, mientras estaba en la Tierra. Me sentí perdido y solitario, mientras trataba de comunicarme con El muchas veces. Esta es una prueba muy dura, que sufrirán ustedes, cuando son verdaderos creyentes en Dios. Esta es una manera en que satanás les empuja lejos, para que después de un tiempo, él espera a que ustedes se den por vencidos en su búsqueda por Mí, para que caigan de nuevo en caminos mundanos, que serán cautivadores, pero que no satisfacen.

¿No saben que la oración les prevendrá de que esto suceda? ¿No se dan cuenta de que Yo permito esto para su propio bien y como parte de su preparación para ganar fortaleza espiritual, que es sólo alcanzada mediante este abandono?

Los caminos de Mi Padre son difíciles de entender para ustedes, hijos. Solo confíen en Mí, vuestro Jesús y llámenme para darles las gracias que necesitan y luchar conmigo para salvar a sus hermanos y hermanas. Ellos deben ser salvados de los planes malvados, que están siendo orquestados en vuestro mundo, por aquellos poderes que buscan controlarles la mayor cantidad de cosas que ustedes necesitan para sobrevivir.

Recuerden Hijos que estoy tan cerca de todos Mis seguidores, que cuando el GRAN AVISO se lleve a cabo, Mi ejército surgirá inmediatamente para ser un poderoso adversario de satanás.

La esperanza, hijos nunca debe de perderse. Os salvaré de los horrores de vuestro  mundo, el cual está en total confusión, causada por la pérdida de Fe en Mi Padre Eterno.

Todo esto está por cambiar, cuando el mundo sea testigo de la prueba que necesita para aceptar la existencia de Dios Padre (el GRAN AVISO).

Vuestro Jesús, Salvador de la Humanidad

Leer más: https://www.elgranaviso-mensajes.com/news/a30-nov-2011-1-2-/

Descubre más desde Ejército Remanente🏹 Noticias

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo

Salir de la versión móvil