Plan diabólico con el fin de destruir la obra de la creación y borrar todo signo de bien sobre la Tierra al grito de «Non Serviam» e instaurar la tiranía del Anticristo. Los miembros de esta secta maldita para destruir el Reino de Cristo también usan la autoridad moral del Pseudo Papa para hacer que los fieles se vacunen. Una tiranía que no se puede derrocar con la revolución sino diciendo la verdad para restituir la Corona que Sus enemigos le han robado, gritarla por todas partes y hacer Reinar a Nuestro Señor en nuestras almas, en nuestras familias, en nuestra Patria en todos los ámbitos de la vida pública y privada y Reine con Él Nuestra Señora. Sólo donde Cristo Reina hay verdadera Paz.
Satanás será aprisionado durante Mi Reino y ya no engañará más a los hijos de Dios
19 de Diciembre, 2012
Mensaje del Libro de la Verdad 🏹
El mundo debe saber que la Era de Paz será la culminación de Mi Promesa, en donde Yo Reinaré sobre los Nuevos Cielos y la Nueva Tierra. Este será un Reino Espiritual y Mi Iglesia, la Nueva Jerusalén, estará en paz y Mi Palabra será escuchada entre todas las naciones.
Satanás será aprisionado durante Mi Reino y ya no engañará más a los hijos de Dios. Este Reino, no será simbólico, sino donde el Árbol de la Vida respirará Amor y Paz, para que todos aquéllos que son bendecidos en disfrutar Mi Nuevo Paraíso, no sufran la muerte, incluso cuando Satanás sea liberado, aunque sea por un corto tiempo, al final de este período.
Mi Plan está de acuerdo con la Voluntad de Mi Padre y ningún hombre tiene el derecho de negar la Voluntad de Dios.
No os equivoquéis, debéis aceptar la Palabra de Dios que está contenida en el Libro de Mi Padre, porque si no, entonces seréis engañados en cuanto a las profecías dadas al hombre desde que el tiempo inició.
Seguid solamente Mi Camino. Aceptad Mis Promesas. No dudéis de Mí porque me insultaríais. Debéis aceptarme como vuestro Salvador y confiar en Mí totalmente.
Mi Palabra es la Verdad. La Verdad, cuando sea aceptada por cada alma viviente, será la llave a la libertad y a las Puertas de Mi Nuevo Paraíso.
Vuestro Jesús